Las hormigas, aunque son pequeñas de tamaño, trabajan para ser grande |
Por lo general, mucha gente cree que solo hay dos tipos de vocación: sacerdote o fraile/monja. Sin embargo, en realidad hay muchas vocaciones. Primero está la vocación a la vida. Si, vivimos porque Dios, que es misericordioso y nos ama, nos ha creado. Pero también está la vocación como hijos, como hermanos, como compañeros de vida (compañeros de clase, compañeros de trabajo, compañeros de una parroquia...). Hay muchas vocaciones, pero no tenemos que estar obcecados con la idea de tener que ser sacerdotes, o frailes, o casarnos, o no casarnos... pues no depende de nosotros, sino de Dios. El truco está en buscarlo, rezandole a Dios, y dejarnos sorprender y realizar por Él.
Una de las claves, para ello, y sobre la que he escrito en varias ocasiones, es la de estar centrado en el momento presente, el aquí y ahora, tomando distancia con las cosas de ayer que aún nos duelen, no pensando en un futuro que aún no ha venido. El ayer pasó, y para alejarnos del pecado, de nuestros errores, basta con pedir perdón a Dios (pidiéndoselo personalmente, y confesándolo). El mañana ya vendrá, y todo será como Dios quiera, cuando Dios quiera y donde Dios quiera (como decía Santa Maravillas de Jesús). Ora, medita, reza, deja que Dios actúe en tu vida, y obtendrás energías renovadas.
Las estrellas son agujeros por los que se filtra la luz del infinito. (Confucio) |
Yo creo que cada uno de nosotros tiene una Misión personal. Pero, personalmente, creo que lo bueno es preguntarnos ¿Qué querrá Dios de mí? y pedirle ayuda.--- ¡Él nos sorprende!
En medio de la desesperación Dios nos llena de esperanza |
Quizá estás pasando por una época de agobio, sufres por alguna cosa. Piensa que Dios ha creado cuanto existe, y lo ha hecho por amor. Te ha creado a ti, y a los demás. Para superar momentos de crisis lo mejor es alabar a Dios y darle gracias por su creación. Piensa una cosa... lo que depende de ti, puedes preocuparte por ello y tratar de arreglarlo. Pero no debes preocuparte de aquellas cosas que no dependen de ti, tal como enseñaban estoicos como el emperador romano Marco Aurelio. Intenta tener buena relación con los seres humanos, aprendiendo a respetar a los demás y apreciándolos como personas que son, sin categorizar, sin etiquetar, sin juzgar. Es importante quitarnos las etiquetas y categorías que nos hemos creado. Por ello es importante tener momentos de silencio, pues es en el silencio donde podemos encontrar las verdaderas respuestas.
Decía un amigo mío "tienes que preguntarte ¿Quién soy? y responder: YO". Si, así es, no eres ni mejor ni peor que los demás. Ni siquiera eres esa persona de hace un tiempo con la que te agobias (por los errores que cometiste), tampoco eres esa persona del futuro que crees que serás, pues ese momento no existe aún. Lo importante es el momento presente. Es en el presente donde puedes pedir perdón a Dios y/o a otras personas. Igualmente en el presente es donde puedes forjar a la persona del futuro, sabiendo como actuar, como ser mejor como persona y en determinados aspectos.
Escena de la película "un guerrero pacífico" |
Para poder encontrar la verdadera paz interior lo mejor es sentir mas y pensar menos. Pero hacerlo con tranquilidad, acallando el alma y la mente para poder escuchar a Dios y, al mismo tiempo, para poder reflexionar de verdad, sin ansiedades y miedos. La paz interior no puedes obtenerla si te centras exclusivamente en ti o tratas de ser perfecto, o te fustigas por caer. Para tener paz interior es bueno aprender a vivir el silencio interno, para no estar todo el rato con pensamientos que te distraen o perturban. Por ejemplo "es que fíjate fulano el problema que me está creado". De acuerdo... si depende de ti, pon solución. Pero si no depende de ti ¿Por qué te obsesionas? Trata de vivirlo con paz interior, con buena voluntad y tratando de ayudar a los demás.
Un obispo amigo mio me enseñó alguna vez que, en muchas ocasiones, nos sucede, cuando pensamos o sentimos, que nos mentimos... "pienso y miento, siento y miento". No significa que sentir o pensar sea malo... pero hay que saber diferenciar. Por ello "si depende de ti, trata de poner solución. Pero si no depende de ti, no te obsesiones.
Pero, como digo, es bueno pensar en ocasiones. Pero siempre de forma correcta, dedicando momentos para la reflexión. Practicando el silencio interior y teniendo momentos para practicar el exterior todo será mas claro y revelador. Y siempre, como digo, esforzándote "día a día, partido a partido" en ser cada día un poco mejor, viviendo los verdaderos principios y valores con fidelidad, siendo integro y honesto. Eso te ayudará en tu crecimiento personal. Piensa que incluso los santos tenían sus dificultades. Sin embargo, en vez de rendirse o desesperarse, trabajaban día a día por vencer esas dificultades. Queda más de un mes para que se celebre la San Silvestre Vallecana. Pero, aunque no lo sepas... quien este año ganará esta mítica carrera ya la está ganando con su entrenamiento y actitud vital.
No eres fruto de la casualidad sino que eres un hijo de Dios Padre que te ama y quiere que transmitas el amor para poder dejar una huella en el mundo. Independientemente de que seas creyente o no, pues Dios actúa de infinitas maneras en nuestra vida, y salva a quien quiere, como quiere y de la forma que quiere. Con el amor puedes influir positivamente en los demás, incluso en aquellos con los que te has enfrentado. Pero siempre con paciencia y tranquilidad, pues la prisa mata el amor. Por ello todo consiste en tener un trabajo paciente y constante. Y tener más silencio te ayuda a concentrarte más en aquello que estás realizando. Y te ayuda a encontrar respuestas.
No tienes que dejarte llevar por emociones, sentimientos o pensamientos. Tampoco hay que obsesionarse por miedos e inseguridades, pues estos pueden estar ocasionados por la falta de confianza en Dios y su perdón. Pero Dios es amor, es providente y como padre nos guía.
Comienza a vivir más sencillamente, sin apegos, sin prejuicios, sin obsesiones, para poder ser mas libre, para no tener ansiedad y poder seguir, de verdad, el camino que Dios tiene para ti: tu misión personal. La mayor vocación es la vocación a la vida. Pero para ello, lo mejor es dedicar tiempo a trabajar en silencio, sin agobiarte por pensamientos y sensaciones. El silencio no está vacío, está lleno de respuestas.
Michael Jordan. Le dijeron "no llegarás". Él llegó volando |
Miguel Indurain, una gran historia de un formidable campeón |
Pero ¿Qué hacer durante las dificultades? yo recomiendo acordarse de esa enseñanza de los estoicos "Si depende de ti ¿Por qué te preocupas? Si no depende de ti ¿Por qué te preocupas?". Cuando algo depende de ti, trabaja para conseguir solucionar las cosas. Pero si no depende de ti, no te obsesiones con ello. De todos modos, recomendaría también pedir consejo y dedicar tiempos a reflexionar y pensar, siendo fiel a tus principios y valores. Dedicar tiempos a solas contigo mismo para pensar, orar, reflexionar... te ayudará a salir adelante. Y recuerda, es importante el silencio tanto interior como exterior. Por eso te animo a reservarte ratos para ti mismo.
Pero, sobretodo, lo mas importante es entrenar la paciencia. Quieres mejorar, quieres crecer... pero tienes que tener paciencia. No pretendas crecer o mejorar de golpe, no pretendas superarte a ti mismo mejorando repentinamente. La paciencia es la madre de la ciencia. Para crecer como persona tienes que ir poco a poco, con constancia, "partido a partido, jornada a jornada". La prisa mata el amor, y ese amor es lo que nos mueve a crecer, a ser mejores. Con prisa no hay crecimiento posible.
La clave para la misión personal reside en tener paciencia. Si quieres mejorar como persona, crecer en diferentes aspectos, está muy bien. Pero no es bueno ser "un ansias". Es importante, como he dicho en varias ocasiones, vivir centrado en el momento presente, trabajando sin prisa (siempre que sea posible), disfrutando de lo que Dios y la vida te ponen y aceptando aquello que resulte adverso y pueda perturbar tu alma, tu mente, tu espíritu.
Para poder crecer como persona es importante ser sencillo, aprendiendo a buscar a Dios en la sencillez y lo cotidiano. No hace falta esperar a grandes fenómenos atmosféricos para ver a Dios en tu vida. Dios actúa en la sencillez de un bello amanecer, en la sonrisa de un niño o los sabios consejos de un amigo.
Por ello has de trabajar por conseguir las cosas que deseas, con la confianza de aquella santa que decía “Lo que Dios quiera, cuando Dios quiera, como Dios quiera”. Para ti puede ser clave, sobretodo a la hora de crecer, tener presente a Jesús en el Momento presente, ser consciente de cómo actuaría Él y hacerlo así, para de esa forma ser fiel a tus principios y valores.
Sentado junto a Dios, en silencio, Él te ayudará |
Pero ¿Como hacerlo durante las adversidades? no fustrándote ni enfadándote. Aprende a aceptarlas, aprende a alabar a Dios a pesar de todo, aprende a comprender también que si Dios quita o no da algo es porque hay un motivo profundo. O tal vez esa cosa o persona no es buena para ti, o aún no es el momento de algo. Y esto no es algo que tengas que entender de pronto, pues la clave está en ir entendiéndolo y en aceptarlo. Sobretodo en aceptar.
Todos tenemos vocaciones en nuestras vidas, todos tenemos obras que realizar. Pero, para conseguirlo, tienes que trabajar, con constancia y paciencia, por dejar tu huella, para así poder influir positivamente en los demás.
No tienes que buscar el mero fervor o los fuegos de artificio, sino aquello que realmente te da alegría porque está enraizado en tus principios y valores. Para mejorar como personas, para obtener una personalidad imbatible, no hay que buscar un placer aparente sino la verdadera alegría, esa que te viene cuando Dios actúa en tu vida.
Recuerda siempre, el silencio no está vacío, está lleno de respuestas. Concluyo ya dando unos últimos consejos:
- Sientete agradecido por tu familia y por esos amigos que te acompañan durante el caminar vital, incluso a pesar de aquellos problemas que quizá tengas. Especialmente agradece a quienes te aportan e influyen positivamente, te dan paz y buena energía, pues son los que merecen la pena.
- Manten una mirada positiva, tratando de ser positivo en todo momento, pues solo la positividad, solo la verdadera alegría es contagiosa. Si de verdad quieres dejar huella y ejercer influencia en los demás, esto solo puede hacerse desde una mirada y una actitud positiva.
- Aprende a ser mas contemplativo. Contemplativo incluso en la acción, observando y sintiendo, viendo con el corazón. Como decía Antoine de Saint Exupery en “El Principito”: Lo esencial es invisible a los ojos, se ve con el corazón.
- Vive con mas calma. Se puede ser puntual yendo despacio. No hace falta hacer las cosas a galope. He de pedir la gracia de vivir el momento presente.
- Elije como afrontar las circunstancias vitales, pues tenemos “habilidad para responder”,
que es el verdadero significado de “responsabilidad”.
En fin, espero que te guste este artículo y que también te ayude a crecer como persona, a entrenar una personalidad imbatible, a estar mejor física, espiritual y mentalente. Pero, sobretodo, practica el silencio. Recuerda siempre... el silencio no está vacío, está lleno de respuestas.
En fin, espero que te guste este artículo y que también te ayude a crecer como persona, a entrenar una personalidad imbatible, a estar mejor física, espiritual y mentalente. Pero, sobretodo, practica el silencio. Recuerda siempre... el silencio no está vacío, está lleno de respuestas.
Marco Aurelio, autor de la frase "Si depende de ti ¿Por qué te preocupas? Si no depende de ti ¿Por qué te preocupas? |