domingo, 9 de junio de 2019

Claves para mejorar en el entorno social y laboral

"El que no trabaje, que no coma"



Esta frase del Apóstol San Pablo (II Carta a losTesalonicenses, 3:10-12) parece provocadora. Sin embargo, encierra una gran verdad.

¿Como encontrar curro en el siglo XXI? 

Hoy he querido reflexionar sobre un aspecto que, actualmente, genera mucho debate en nuestra sociedad: EL TRABAJO.

Suena políticamente incorrecto utilizar dicha expresión. Pero, sinceramente, creo que es posible encontrar trabajo. Incluso hoy en día. La clave está en focalizar nuestra atención, conociéndonos a nosotros mismos, siendo conscientes de nuestros dones y talentos.

Posiblemente, estés pasando por un mal momento vital. Tal vez, estás deprimido al no encontrar trabajo. Quizá te sientes infeliz, porque no te valora tu jefe, o te llevas mal con tus compañeros.

Pero yo te digo: realmente vales mucho, eres lo más sagrado que hay en este mundo. Así que no te infravalores, explota todo el potencial que tienes dentro de ti.

Tal vez no seas creyente y pienses ¿De qué me habla este crédulo? Sinceramente, creo que Dios ama a todos los seres humanos. Incluso, aunque estés pasando por una crisis laboral, sigues siendo criatura de Dios, Él te ha creado, te ama desde la eternidad y te ha asignado un papel en este gran teatro que es la vida.

Posiblemente te conformes diciendo “No hay trabajo”, pero ¿Seguro que lo has buscado bien? Tal vez elegiste una carrera prometedora, o no. Pero, en realidad, no era la que te correspondía.

O, quizá, dicha carrera es para ti, pero debes pulir ciertas cosas en tu vida (aprender idiomas, ser mas positivo, establecer relaciones sinérgicas, cuidar dones y talentos, amar al prójimo, ect.).

Muchas personas, debido a los mensajes que nos vende la sociedad, se empeñan en ir por un camino que no tiene salida. Lo hacen ignorando otras posibilidades que se presentan en sus vidas, sin verlas o sin atreverse a cambiar de vida.
 
Por ello, yo te animaría, amigo lector, a practicar la instrospección, conociendote a ti mismo ¿Cómo eras de niño? ¿Qué te gustaba hacer? Tal vez, disfrutabas dibujando, quizá en algún momento te planteaste vivir en un pueblo, trabajando con los animales, siendo pastor, ganadero, o agricultor. O quisiste trabajar desde casa.

Sinceramente, creo que la actual sociedad se equivoca rotundamente. Según muchas personas, trabajar es “O estás en la obra (incluido carpinteros, fontaneros, ect.), o trabajas en una oficina, o en la hostelería”. Que, ojo, no digo que estos trabajos sean malos, que no lo son. Pero, cuando camino por la ciudad, observo infelicidad en muchas personas.



No es que la vida en el campo sea más facil que en una urbe. Que no tiene por qué serlo. Pero me pregunto si, realmente, vivimos mejor que nuestros antepasados, por muchas dificultades que tuvieran.

Creo que podemos trabajar en lo que nos gusta si nos lo curramos. Todos valemos para algo, todos tenemos un talento. Por ejemplo, yo no tengo talento musical como para ser un tenor. Sin embargo, me gusta escribir, creo que se me da bien. Por ello escribo, con mayor o menor acierto. Un día podría redactar la historia de un famoso músico, publicando una biografía sobre él. Por ejemplo Mozart.


Por ello, querido lector, te invito a eliminar de tu vida mensajes tóxicos como “No encuentro trabajo, o “Las cosas están muy mal”.  Me atrevo a decir ¡Créalo”. No busques trabajo, crea tu propio trabajo. Averigua qué dones y talentos tienes, y ponte a trabajar con ellos. Día tras día, partido a partido, jornada a jornada... así encontrarás tu verdadera vocación laboral, trabajando en lo que te gusta.

Diferénciate del resto, no hagas como ellos. Los filósofos estoicos nos enseñan “Si depende de ti, no te agobies. Si no depende de ti, no te agobies”. Por ejemplo Epicteto, que nació siendo esclavo romano, terminó siendo uno de los estoicos más famosos.

Cada uno de nosotros tiene una cualidad. Por ello, debemos centrarnos en aquello realmente importante, atendiendo a lo que, realmente, depende de nosotros,

Tenemos que apostar por nuestra vocación laboral, realizando aquello que nos entusiasma desde pequeños. Por ejemplo escribir. Pero no me refiero a que vivas sin trabajar mientras esperas lograrlo. Tienes que trabajar por ello, sin rendirte ni perdiendo tiempo.

Quizá, cuando enviamos el Curriculum Vitae, mendigamos un puesto de trabajo. Pero tu vales mucho como para ir mendigando por ahí.

Aunque no me gusta Apple, debo admitir la valía de Steve Jobs. Supo ver cuales eran sus talentos, que necesitaban los demás, trabajando por mejorar sus vidas. Tu puedes hacerlo. Pero, para ello, debes conocerte y potenciar tus cualidades y talentos.

Quizá no te hagas rico como Bill Gates. Tal vez no serás un lider y creador de opinión, como el Papa Francisco. Posiblemente no lograrás ser famoso como Ken Follet. Pero tienes mucho que aportar con tu trabajo. 

Puedes ser escritor, agritultor, carpintero, ect. Hoy en día, con Internet, se abren infinitamente las posibilidades para aprender un oficio. Hoy en día es más facil ejercer un trabajo desde cualquier lugar del mundo. Incluso en un pequeño pueblo que tenga internet. Solo tienes que salir de tu área de confort.

¿Cuanto tiempo dedicas, en tu día a día, a ver la televisión, o conectado al Internet mas pueril (redes sociales, foros...)?

Cada minuto que malgastas con estas cosas, es un minuto que pierdes de tu vida. Un tiempo vital que ya no habrás invertido para mejorar personalmente. Eso te puede hacer infeliz. Quizá disfrutaste viendo una serie. A lo mejor te gustó discutir en aquel foro. Pero, con eso has dejado pasar el tiempo, sin lograr trabajar en lo que, de verdad, te apasiona.

Muchas personas no logran trabajo por que no saben hablar inglés. O carecen de experiencia laboral y no han intentado aprender otros oficios o reinvertarse. Pero se lo pasaron genial, o al menos eso creen, viendo tal o cual programa ¿Para qué?

Pero aún estás a tiempo. Si me estás leyendo y no te has ciscado en mí, entonces te merecerá la pena seguir leyéndome.

No busques trabajo. Crealo, analízate, descubre tus dones y talentos... trabajando con ellos. Dedicate a trabajar en lo que de verdad te llena. No te fijes en el éxito de los demás, pues ellos no dependen de ti.

Tu propia vida, en gran parte, si depende de tu propio esfuerzo. Dedicate a formarte y trabajar con constancia, atento al momento presente, el aquí y ahora. Poco a poco, con fe y perseverancia, lo lograrás. 

Trabaja en lo que te enriquezca por dentro y te permita vivir. Trabaja para vivir, no vivas para trabajar.

Sal de tu área de confort, estableciendo nuevas relaciones. Juntate con personas con las que, quizá, un día podrás trabajar en equipo.

No busques trabajo, busca oportunidades sinérgicas

Aquí viene el otro punto fuerte de este artículo. No busques trabajo, busca oportunidades de colaborar sinergicamente con otras personas. Lo explico con un ejemplo: eres periodista y mandas tu CV  a periódicos, radios y televisión. Pero no tienes éxito. 

Hoy, con Linkedin y las redes sociales, (que bien usadas son una maravilla), tienes la oportunidad de conocer gente de tu ámbito laboral, con quien puedes trabajar en equipo. Claro, no basta con conocerlos. Como te he dicho, ponte a trabajar.



Supongamos que, siguiendo el ejemplo, eres un periodista interesado por el tema de los conflictos bélicos internacionales.

De repente, aumenta el conflicto entre Rusia y Ucrania. Si eres listo, y sé que lo eres, realizarás un seguimiento del conflicto, lo más cercano posible: mirarás medios de comunicación nacionales e internacionales, blogs especializados, el Twitter de ucranianos, rusos, o periodistas que estén allí. Entonces crearás un blog. Escribirás artículos y noticias a diario. Si eres espabilado y te lo curras, lograrás seguidores. 

¿Te suena de algo esta historia? Pues se trata de algo real. Así comenzó Principia Marsupia. Tuvo un trabajo bien hecho, y un periódico lo contrató. Se llama Alberto Sicilia, es  doctor en física teórica y reportero freelance.

La idea es esta: te gusta algo: trabaja en ello, a diario, con constancia. Date a conocer ante personas que puedan contratarte. Pero no lo hagas mendigando trabajo. Hazlo como alguien que ya está trabajando, mostrando tu talento. De esta forma, podrás ponerte a disposición de una empresa, estableciendo una relación laboral fructifera, basada en la colaboración sinergica.

Concluyo:

Insisto en ello. No busques trabajo, crealo. Establece relación con personas de tu ambito laboral, gente con la que podrás colaborar, que te podrán  ayudar. Pero, ojo, no te conformes con que te ayuden. Trabaja también para ayudarles. Pero comienza trabajando por mejorar personalmente.

Una de las habilidades de la gente altamente efectiva es: "yo gano-tu ganas". Es decir, si quieres trabajar, comienza a amar al prójimo como a uno mismo. Para ello, el primer paso está en cuidar al tipo que ves en el espejo, cuando te despiertas y vas al cuarto de baño.



Esta es una de mis canciones favoritas de Michael Jackson. En ella nos da claves para ser mejores como personas y tener un mejor rendimiento personal, social y profesional. Para ello, es importante mejorar al tipo del espejo, aquel a quien vemos cuando, tras despertar, vamos al cuarto de baño y nos vemos a nosotros mismos junto al lavabo. Mejorar al tipo del espejo supone el primer paso para la mejora personal. Así será mas facil crecer, incluso tener éxito social y laboral.


El mundo está hecho para los guerreros pacíficos. "El Guerrero Pacífico" es una película de superación personal, basada en el libro de Dan Millman, un gimnasta que llegó a ser medalla olímpica cuando todo parecía perdido.

Pero, para lograr nuestros sueños, nuestros objetivos, no debemos ver a los otros como enemigos a quienes demoler. Si queremos tener éxito en la vida, debemos aplicar el efecto "GANAR-GANAR".
Stephen Covey, autor del libro "Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva", escribió: "Pensamos en triunfar relacionado al hecho de que otro falle; esto es si yo gano, tu pierdes. O si tu ganas, yo pierdo. El principio ganar-ganar (win-win) ve la vida como un escenario cooperativo, no competitivo; un marco en el que mente y corazón buscan, constantemente, el beneficio mutuo en las interacciones del ser humano".

Comienza a llamar a las puertas, ofreciendo tu colaboración para trabajar allí. Pero hazlo presentando un trabajo ya hecho, una experiencia previa (incluso aunque no sea laboral, en el sentido de cotización quiero decir).

No te garantizo el éxito. Seguramente dependerá de tu esfuerzo, constancia, fe y, sobre todo, del amor que pongas en tu trabajo. Y, por supuesto, del amor al prójimo.

Centrate en lo más importante: aquello que depende de ti, que te apasiona, aprovechando tus dones y talentos. Si depende de ti, no te agobies. Y si no depende de ti, tampoco te agobies. Trabaja por aquello que, realmente, es importante y depende de ti. 

Animo, no busques trabajo... ¡Crealo!